Durante el desarrollo embrionario, diferentes grupos de células coordinan su comportamiento para organizarse en tejidos funcionales. Para esto, diversos mecanismos mantienen la comunicación entre distintas células y tejidos. Muchos estudios han permitido determinar las vías de señalización que transducen señales del exterior al interior de la célula. Sin embargo, para un entendimiento global de la comunicación celular, es importante tomar en cuenta la distribución espacial de estas señales y de las células que las producen.